sábado, 12 de noviembre de 2011

12 de noviembre


Hoy ha sido un día un poco de transición. El grupo cada vez está más unido y nos vamos conociendo todos un poco mejor. Después del trabajo de unificación de ayer, hoy hemos tenido un día más propio de turismo. Aún así, la energia se hace muy intensa aquí en Egipto en muchos lugares; todo el país es como una fuente de poder.

Hoy tocó madrugar un poco, para aprovechar el día ya que la agenda era muy intensa, a las siete de la mañana toque de diana y todo el mundo en pie. A las ocho y media teníamos  que estar en ruta hacia la ciudadela. La verdad fue bastante duro, porque ayer tuve un montón de problemas de conexión en la habitación, que derivaron en tener que trabajar en la recepción del hotel hasta las 3 y pico de la madrugada; espero que esté mereciendo la pena, eso seréis vosotros los que lo valoréis.

En la ciudad de el cairo hay una meseta, conocida aquí como la meseta de alabastro, ya que en la cima, tenemos una gran mezquita, conocida (como no) como la mezquita de alabastro, o el templo de Muhaamad Ali (no es el boxeador, evidentemente).
Se le llama así porque en su momento (antes de los inevitables saqueos) estaba completamente forrada de alabastro. De hecho, su interior conserv el precioso marmol. Es una mezquita gigantesca, ostentosa, fruto de un mandatario arrogante que abolió la cultura mameluca y erigió este momento sacrificando parte de sus históricos monumentos para costear su fabricación. Una pérdida o un sacrificio excesivo si vemos las piezas que algunos de los países que colaboraron en su creación se llevaron a cambio.
Es un lugar de oración, hermoso, enorme, lleno de detalles. Hay que acceder descalzo, y las mujeres deben taparse los hombros para acceder a su interior. La plaza central contiene una fuente de marmol inmensa y sobre la estructura luce un reloj, cuya maquinaria (sí, sólo la maquinaria) fue canjeada a francia a cambio de un obelisco milenario de valor incalculable (tal era su gusto por la tecnología y su poco aprecio por la cultura milenaria de su país).
En su interior, una lámpara de araña gigante rotatoria, que ocupa la parte superior, acompañada de varias cúpulas con precioss vidrieras (todo lujo era poco para dar muestras de su poder).



Dentro escuchamos su hisoria e hicimos con Xavier una reflexión sobre las diferentes religiones y culturas, que a veces, en vez de enriquecernos, parecen servr para separarnos. Conceptor euqivocados, que en esta nueva era trataremos de cambiar, para estar en vez de divididos (en paises, religiones, política...) estemos cada vez más unidos y nos complementemos unos a otros.

Después de la visita a la ciudadela fuimos al barrio kopto (el barrio cristiano ortodoxo), donde se comparten varias religiones. Es un barrio viejo, de calles estrechas y pequeñas capillas, iglesias y sinagogas.

Era muy curioso entrar en los diferentes templos y sentir la energía de maneras tan variadas. Es cierto, que la energía se nota con mucha ntensidad en los lugares de oración, a veces la energía te aporta paz, otras veces te inquieta, otras te aturde... y a cada persona le aporta sensaciones diferentes.
Yo, por ejemplo, en la iglesia de san Jorge, sentí una intensidad de Hibiki descomunal, agradable, no podía dejar de mirarme las manos. Es un lugar maravilloso, para mí esa energía era puro amor, y varios del grupo sintieron lo mismo. Es un lugar pequeño, humilde, pero que transpira fé por todas sus paredes, estaba como en casa allí. Según los lugareños, Jesús mismo estuvo allí oculta en las criptas... podría ser!! No lo puedo negar.
Curiosamente, justo después fuimos a la sinagoga, y la energía era casi opuesta (mal rollito, jejeje). Allí Xavier nos dio una explicación sobre el símbolo clásico judío del candelabro, que ilustro aquí debajo. Os dejo también con la charla que es muy interesante y es el único montaje que voy a publicar hoy al margen de las fotos.

 Hoy llevo todo el día muy conectado con la energía, es posible que algo esté cambiando.

Después de comer fuimos al museo de El Cairo, donde se guardan las joyas arqueológicas del país, la tierra de faraones.
 Una visita muy interesante, pero bajó el nvel energético del grupo y no os voy a revelar ada que no conozcais o podáis encontrar en google o similares, así que nada, os cuento que estuimos como dos horas y media dentro, con guía, auriculares, charlas... todo muy técnico. Lo más potente, el tesoro de Tuttankhamon.
Una vez cumplido en el museo tocó visitar el bazar Ha-lili
Un sitio loco donde casi es imposible caminar. A veces compras más porque ves la necesidad de la gente que porque realmente quieras su mercancía.

Hoy estoy muy muy cansado, así que no hay más material, pensaba crear un album nuevo en picassa con material fotográfico, pero eso será mañana si el tiempo lo permite. Gracias por estar ahí y leerme.
Mañana estaré en el interior de la gran pirámide y quiero estar a tope de fuerzas para realizar un gran trabajo con el resto del grupo. 
Aquí se despide vuestro corresponsal espiritual favorito, desde la tierra de faraones.

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